De portería a portería no es guarrería… ¡Pedazo de gol de Paco!
El Morata arranca un valioso empate frente al líder en un partido muy serio
Alineación:
EDM Alevín A (F7): Paco, Óscar, Rodrigo, Yeray, Eri, Diego, Antonio, Elena, Marcos, Jorge, Alberto y Luis.
Goles: 0-1 (m. 20); 1-1 (m. 45).
Crónica de José Manuel Álvarez
Partido a las 2 de la tarde, apetecía previa con cervecita y es ahí donde me entero por José Luis, padre de Jorge, que ha fallecido Luis Aragonés, el Sabio, el zapatones o el inventor de la roja.
Este extracto es de Xabi Hernández “Luis iba de cara; te miraba en el entrenamiento, se acercaba y te decía: “Usted está haciendo el jeta, ha venido a entrenarse y no le veo. ¡A mí no me gustan los jetas!”. Y se iba. Luis nunca engañaba, iba de cara. “Tú no juegas porque has dado pena esta semana”, “¿Estás cansado o qué?”, “Hoy has estado fantástico, esta semana lo vas a bordar”. “¿Se cree que yo me chupo el dedo, que soy gilipollas?” Hasta siempre, míster
Y con todos estos descubrimientos andaba yo cuando el señor colegiado ordena el saque inicial. Empezamos el primer cuarto de hora muy bien colocados, y aunque no disfrutamos de ocasiones, el rival se encontraba incómodo, porque tampoco era capaz de llegar. Jorge, capitán, ejercía como tal dando la solidez en defensa, con Alberto y Óscar. Elena, un poco más retrasada, actuaba entre la línea de defensa y el ataque, comandado por Luis y Diego.
El plan parecía claro: contener a los chicos del Gredos para salir en vertical. El equipo, bien asentado en nuestro campo, carecía de lo mismo que los últimos partidos, llegada a puerta y goles. Con el nuevo sistema táctico en tres hemos ganado en defensa, pero hemos perdido capacidad ofensiva; al igual que los extremos tienen que defender, la línea defensiva tiene que subir para atacar con mayor superioridad. Pero primero, lo que están haciendo nuestros técnicos, conseguir que el equipo sea más sólido en defensa. Lo demás llegará.
Seguimos con el partido, tenemos alguna ocasión, pero nada significativa, varias arrancadas de Luis y una falta de Diego, pero seguimos sin asustar el rival. Ellos, por su parte, dan alguna sensación de peligro y en una ocasión, un tiro al palo, pero el partido, en líneas generales, es muy igualado.
Abel y Tito cambian el equipo. Nuestros chicos con el cambio tienen unos momentos de titubeo táctico en la línea ofensiva. De ahí no puede salir nada bueno y los locales nos ganan en una acción la espalda y suben el 1-0 en el minuto 20. Pese al gol, el equipo parece entonarse, pero seguía faltando verticalidad, movimiento arriba y último pase. Pese a ello, tenemos un palo de Eri y alguna ocasión más con Antonio, que no materializamos yéndonos al descanso con 0-1 en el marcador.
Lejos de hundirse, el jarro de agua fría del gol en la primera parte envalentona a nuestros chicos, echándole una casta al partido que se traduce en un equipo defensivamente ordenado y con los chicos de adelante muy solidarios. Todavía recuerdo alguna acción del pequeño Yeray y Rodrigo rebañando el balón en el suelo.
El equipo estaba mostrando ese plus de lucha y de carácter demostrando que no quería perder. En una jugada a punto estuvimos del empate, en un tiro de Eri que quizás debería haber dejado a Antonio, mejor colocado para usar su zurda. Pero necesitábamos alguien que nos enseñara el camino del gol. Así el encontró a Paco, sí, sí, nuestro portero. Os acordáis del “De portería a portería, guarrería”. Era uno de los argumentos que utilizábamos en el patio del colegio para justificar lo injustificable: que el portero rival nos acababa de meter un gol desde su área, y que ese gol no era válido (sin razonar el porqué). Las reglas del deporte rey variaban mucho en aquellos partidos que se jugaban con bata o uniforme escolar: “¿gol o penalti?”, servía para resolver salomónicamente una jugada dudosa que había terminado en un gol que no aceptábamos, “chupinazo no vale” era un ruego al delantero que iba a lanzarnos un penalti, al que retábamos para que nos lo lanzara flojito y colocado para no hacernos daño, etc.
En fin, nuestro portero Paco siguiendo instrucciones de nuestros técnicos y aprovechando el viento de cara, cada vez que tenía ocasión sacaba en largo. En uno de los saques, en el minuto 20 golpeó el cuero con tal fuerza y, con la ayuda del viento, recorrió todo el campo, sorprendiendo al portero del Gredos.
No sabemos si lo primero que hizo el guardameta del Gredos fue gritar “¡de portería a portería, guarrería!” cuando Paco le batió con un lanzamiento desde su propia área. De nada le hubiese servido, de nada porque, afortunadamente, esa ley de la calle no sirve en el fútbol de competición. Asi que minuto 22 y 1-1.
En los últimos minutos el Gredos se tira a por nuestra yugular. La presión es asfixiante y nos obligan a recular. Nuestros delanteros ya están cansados y les cuesta bajar a defender, rompiéndose el equipo en dos líneas, pero luchamos como jabatos. Una falta final que sale por el palo izquierdo y final del partido 1-1. Resultado justo.
Terminamos la primera vuelta enfrentándonos al Julian Marías. Hay que refrendarlo con una victoria. Enhorabuena a todo el equipo, a seguir así con ese nivel de entrega, compromiso, lucha y orden. Estoy seguro de que el acierto de cara a puerta vendrá. Como decía Luis: “Ganar, ganar y volver a ganar”, eso es el fútbol.