Donghoon Oh: “Las normas que se imponen en esta Escuela no impiden la creatividad del entrenador”

Donghoon Oh: “Las normas que se imponen en esta Escuela no impiden la creatividad del entrenador”

Donghoon Oh, entrenador surcoreano del Juvenil C

“Aunque pude sonar un poco fuerte, en mi vida solo hay fútbol”

Con un título equivalente al INEF español, tiene como objetivo ser el primer técnico asiático en Europa; comparte el estilo de combinación que se practica en la EDM y está de prácticas en ella porque le gustó lo que vio a través de Internet

  • “Todo el mundo, incluido los padres, me respetan bastante”

  • “Cuando se tiene el balón, se dispone de muchas más posibilidades de hacer cosas”

  • “Me gustaría ser el primer entrenador asiático que trabaje en Europa. Pero sé que es muy difícil, casi imposible”

  • “En España, la gente es bastante cariñosa. Aunque, como en todos los países, siempre te encuentras con algún tonto que no sabe comportarse”

Surcoreano en Madrid

Alejandro Posilio

Este sensible entrenador de 31 años, nacido en Busan y conocido como Dong lleva el fútbol en sus venas, a pesar de que en su Corea del Sur no es un deporte con mucho peso. Pero su determinación a trabajar como entrenador le ha llevado a viajar por el mundo para sacarse el título equivalente al INEF español y el de entrenador. Ahora, en España, se muestra encantado con lo que está asimilando y está sorprendido con el fútbol por conceptos que se enseña en la EDM. Descubrió la Escuela por Internet y le gustó tanto lo que vio, que solicitó hacer prácticas aquí. Dos operaciones de rodilla le impiden practicar otros deportes y se define como un hombre casero, que se conforma con ver películas en la tele y salir con los amigos de vez en cuando.

¿Cuándo y cómo empezaste tu relación con el fútbol?

Cuando yo era pequeño en Corea del Sur no había escuelas de fútbol. Realmente solo había fútbol de élite, por lo que no pude aprender a jugar bien al fútbol. He jugado con mis amigos, pero nunca en un equipo con entrenador. En Corea, todos los entrenadores son ex futbolistas. Como yo no jugué al fútbol en la élite y no tenía oportunidad de llegar a ser entrenador, decidí en el año 2007 salir de mi país con 23 años y buscar la oportunidad en otros sitios.

¿Adónde fuiste?

Me fui a Brasil para estudiar la carrera de Educación Física en la Universidad. Yo había estudiado el primer curso de estos estudios en Corea, pero como no le veía futuro porque yo no había jugado en un gran club, decidí cambiar. Me fui a Curitiba, en el sur de Brasil, donde he vivido más de cinco años. Allí terminé la carrera y durante el curso hice prácticas como auxiliar de preparador físico en la escuela de fútbol amateur Trieste, aunque yo lo que quería era entrenar. También hice prácticas en dos clubes profesionales, en Curitiba y Paraná.

¿Seguiste viajando?

Sí, en el 2011 dejé Brasil y me fui a Lisboa (Portugal) con intención de cursar un máster de entrenamiento deportivo, pero por motivos personales dejé de estudiar y me vine a Madrid. Fue en el 2012.

¿En España qué hiciste?

Me apunté al curso de entrenador de la Federación Española de Fútbol nivel 1. Lo aprobé e hice prácticas en la Escuela del Atlético Madrileño. Tres meses después, saqué el nivel 2 del entrenador y volví a Corea a trabajar. Me cogieron como entrenador en la Fundación del Real Madrid en Corea, pero el proyecto no salió bien y la escuela desapareció. Yo tuve que dejarla un poco antes porque me lesioné y me tuvieron que operar de la rodilla, del ligamento cruzado anterior.

Junto a Nauzet¿Tras la operación qué pasó?

Trabajé un par de meses en Corea y después volví a España a hacer más prácticas y seguir aprendiendo.

¿Fue cuando entraste en la EDM?

Yo había tenido contacto con la Escuela a través de Internet. La vi en Internet y me pareció mucho más interesante que otras que vi en Madrid. Contacté con Guti, el director Deportivo de la EDM, y me contestó que no había ningún problema para hacer prácticas en la Escuela.

¿Qué le decías en el email que enviaste a Guti?

Le ponía que había leído que la Escuela Deportiva Moratalaz estaba abierta a todo el mundo que quisiera aprender a jugar o entrenar al fútbol, y que yo estaba interesado en poder hacer prácticas en ella. Y me contestó que si quería, podía hacer prácticas aquí. Y en mayo de este año me vine para acá.

¿Qué hiciste al llegar a la EDM?

Estuve dos semanas con el Juvenil A que dirigía Jorge Vallejo. Luego se acabó la temporada y en la actual estoy con Nauzet en el Juvenil C. En principio estaba previsto que siguiera con el Aficionado B, con Jorge Vallejo, pero ya tenía muchos ayudantes y me ofrecieron ser el segundo entrenador del Juvenil C.

¿Qué tal la experiencia?

Muy buena. El ambiente es muy diferente a lo que yo conocía. He podido comprobar que en cada país hay cosas distintas. En España, los entrenadores intentan que los chicos disfruten en los entrenamientos y en los partidos. En particular en esta Escuela, se enseña el fútbol por conceptos y se intentan que estos conceptos aparezcan en el partido. Esto me parece muy interesante y coincide con mi manera de ver el fútbol.

¿Eso no lo habías visto en ningún otro sitio?

En Brasil, no. Pero en Portugal viví algo parecido. En Brasil, los entrenamientos son más analíticos y todo está muy separado. Por un lado lo físico, por otro lo táctico y por otro la técnica.

Dando órdenes a sus jugadores¿Qué es lo que más te ha llamado la atención en la EDM?

Las ganas que le ponen los entrenadores a la hora de los entrenamientos. Y también que la Escuela impone una filosofía de juego que evita que los entrenadores trabajen cada uno a su manera y hagan el fútbol que a ellos le gusta. Pero esto no significa que la Escuela coarte la libertad del entrenador. Las normas que se imponen no impiden la creatividad del entrenador, ya que puede desarrollarla, pero siempre dentro de unas reglas.

¿Y algo que no te haya gustado?

El poco tiempo que hay entre los entrenamientos y entre los partidos. No hay mucho tiempo para calentar y adaptarse. Antes de los partidos, calentamos, pero apenas tenemos tiempo para que los chicos toquen el balón. Tras calentar y estirar, entran directamente a jugar sin tocar el balón.

¿Cómo te han tratado en la Escuela?

Muy bien, muy bien. Como soy asiático y vengo de un país en el que el fútbol no es algo importante, yo me preocupaba porque los demás pudieran pensar ‘por qué hay un asiático entrenando cuando en España hay tantos buenos entrenadores’. Pero me he dado cuenta de que era un prejuicio mío. Todo el mundo, incluido los padres, me respetan bastante.

¿Hay mucha diferencia entre entrenar en Brasil o Portugal y hacerlo aquí?

En Brasil, ahora  le dan mucha importancia al aspecto físico. Por ejemplo, en julio hubo un torneo en el que participaron el Madrid y el Corintias, entre otros muchos equipos. Y aunque Brasil siempre ha tenido fama de crear muchos jugadores creativos, ahora le dan más importancia al aspecto físico. El juvenil C del Madrid ganó 3-0 al Corintias. Los jugadores brasileños eran grandes, fuertes y altos, pero no se iban de ninguno del Madrid. Los madridistas eran más bajos y más delgados, pero tocando el balón y dándole mucha velocidad, les superaban una y otra vez. Y en Portugal también me gusta mucho su manera de trabajar, pues entrenan también por principios, más o menos como aquí. Calientan y corren con el balón, intentan trabajar bajo condiciones reales, como en España.

¿Comparte el fútbol combinativo que se enseña en la EDM?

Sí. Pienso igual que Nauzet, mi compañero actual, que enseña a los jugadores a defender con el balón. No solamente defendemos cuando estamos sin balón, también se defiende con el balón. Si tenemos el balón, disponemos de muchas más posibilidades de hacer cosas.

Ayudando con el material¿Pero enseñar este sistema es más complicado?

Claro que sí, pero merece la pena. El camino es más largo, pero una vez aprendido, se puede estar más tranquilo. Si se enseña fútbol directo y no sale, no hay otra opción de jugar. Sin embargo, si se enseña a tocar el balón, siempre existen más posibilidades de lograr distintas jugadas. No digo que solo se pude jugar tocando, sino que hay que saber alternar esos estilos.

¿Lo que has visto en la Escuela era lo que imaginabas antes de llegar?

Me he encontrado mucho más de lo que esperaba. Aquí hay muchas escuelas y clubes en los que aprender, existe mucha más infraestructura que en otros países, con varias ligas en cada categoría. Esto en Corea es imposible. Allí hay pocas escuelas y pocos jugadores. Aquí los clubes están muy abiertos y eso me gusta mucho. Aquí no hay prejuicios y no te ponen dificultades para aprender.

¿Qué tal la relación con Nauzet?

Muy buena. Yo intento ayudar al máximo y le pregunto todas las dudas que me surgen. Pero él también me consulta y me pide opinión. Además, me deja mucha libertad para trabajar. Tengo mucho que aprender de él. Incluso de su forma de comunicarse con los jugadores.

¿Y con los padres de los jugadores?

Bien. No tengo mucha relación con ellos, pero cuando nos cruzamos, nos saludamos. Y como no tengo coche, cuando tenemos que ir a un partido siempre hay padres dispuestos a llevarme en su coche.

¿Cómo te relacionas con los jugadores?

Al principio me costaba un poco, pero poco a poco fui ganando su confianza y ya me respetan también.

Atento a las explicaciones¿Qué tal el nivel que has visto en la EDM?

Es bastante alto en promedio. Hay muchos equipos por categorías. Antes de venir, pensaba que el A jugaba muy bien, el B algo menos y el C tenía menos nivel. Pero he visto que el Juvenil C son los mejores de primer año y los del B son los mejores de segundo año. Es decir, todos juegan a un buen nivel, incluso los D y E. En España hay muchos clubes y el nivel es muy alto.

¿Hasta cuándo en la Escuela?

Por lo menos hasta que termine la actual temporada. Pero, probablemente, seguiré la próxima, porque quiero sacarme el nivel 3 de entrenador.

¿Recomendarías a un compañero coreano venir aquí aprender?

Sí, tengo varios compañeros que les gusta el fútbol y se lo he comentado.

¿Te gustaría vivir del fútbol?

Ese es mi objetivo. Aunque pude sonar un poco fuerte, en mi vida solo hay fútbol. Salí de Corea con 23 años, y llevo casi ocho años viviendo en el extranjero por el fútbol. No hay otro motivo.

¿Y de dónde te viene esa pasión, al ser un país en el que el fútbol es algo secundario?

Me encanta desde pequeño. Siempre he soñado con ser un futbolista de élite. Pero como no había escuelas de fútbol y mi madre no me dejaba, cuando estaba en el último año del instituto decidí estudiar la carrea de INEF. Y como allí no había posibilidad de ejercer como entrenador, porque yo no había jugado en la élite, decidí salir. Ahora no hay muchos coreanos que tengan un título de entrenador como yo. Me gustaría entrenar aquí. Me gustaría ser el primer entrenador asiático que trabaje en Europa. Pero sé que es muy difícil, casi imposible. Pero lo voy a intentar. Y si no sale, volveré a Corea.

 Encantado con la EDM

“Madrid es tranquila en términos de seguridad”

Donghoon Oh asegura que los españoles y los coreanos tienen cosas parecidas.

¿Qué tal en Madrid?

Bien. Por la mañana estudio Español en la Escuela Oficial. Y después del entrenamiento también tengo clase. El resto del día no salgo mucho. Me quedo en casa leyendo y estudiando.

¿Qué es lo que más te ha llamado la atención de Madrid?

Que es una ciudad grande, pero tranquila en términos de seguridad. Cuando vivía en Brasil, era bastante más violento. En España es más o menos como en Corea. Se puede caminar tranquilamente por la noche. Salgo de vez en cuando con los amigos y nunca hemos tenido problemas. Pero soy basten casero. Eso sí, me gusta mucho Sol, Atocha y el Retiro.

Explicando un ejercicio¿Qué no te gusta de la Ciudad?

No hay nada que me moleste. Lo peor es que a veces el transporte no es bueno. A veces tengo que ir a un sitio que no está muy lejos, pero tengo que dar mucha vuelta para llegar.

¿Qué tal la gente?

Los españoles son diferentes a los coreanos, pero en algunos aspectos somos muy parecidos. Por ejemplo, aquí, cuando la gente consume en el bar, no se hacen cuentas separadas, como pasa en otros países. Es igual en Corea. Además, aquí, en general, la gente es bastante cariñosa. Aunque, como en todos los países, siempre te encuentras con algún tonto que no sabe comportarse.

“Me parece estupendo cómo Simeone ha cambiado al Atlético”

Este amante de las películas es un madridista al que le gusta el Atlético.

¿Qué es lo que más echas de menos de tu país?

La comida, los amigos y la familia.

¿La comida es muy diferente?

Sí, es bastante diferente, pero me gusta también la comida española. Yo casi no como fuera y cocino en casa. Muchas veces, me invento los platos que hago, que no son ni coreanos ni españoles. Primero saco los productos, y luego pienso cómo hacerlos.atento a sus jugadores¿De qué vives?

Mi familia me tiene que ayudar para poder vivir aquí, porque no gano lo suficiente.

¿De qué equipo eres?

No tengo ninguno favorito. Antes me gustaba el Madrid, pero ahora también me gusta el Atlético, porque me parece estupendo cómo Simeone ha cambiado el equipo, que ahora se puede medir al Madrid y al Barcelona.

¿Te gusta el tiki-taca?

Sí, pero no soy muy fan. Me gusta mucho el Atlético de Madrid, que hace ataques muy sencillos pero efectivos. Un entrenador debe trabajar según los jugadores que tiene. Con los jugadores del Atlético no se puede hacer el fútbol del Barcelona. Hay que ver lo que tienes e intentar optimizarlo al máximo.