Crónica | Cadete B – Fuenlabrada B

Crónica | Cadete B – Fuenlabrada B

JUSTO REPARTO DE PUNTOS

El Cadete B de Diego Rodrigues no está pasando por su mejor temporada en el Grupo 2 de División de Honor, pues ahora mismo está clasificado como 14º con únicamente 16 puntos conseguidos. Este fin de semana tenía un duro compromiso por delante contra un rival siempre difícil como es el C.D. Fuenlabrada, en este caso su Cadete B también que marcha octavo en la clasificación con 31 puntos. El partido, por tanto, se presuponía difícil para nosotros, pero el equipo en todo momento dio la cara y no decepcionó. 

En los 10 primeros minutos de partido ambos conjuntos pusieron todo de su parte para dominar el juego. En nuestro caso, jugábamos con facilidad tanto en campo rival como en el nuestro, con una buena presión en la zona de ataque sin dejarles jugar, sin embargo, ninguna de las dos escuadras conseguía llegar al área contraria y terminar jugada. La realidad era que el partido estaba bastante parejo.

A partir del minuto 15 ya no éramos tan mordientes como antes, dejando que ellos tocaran a su gusto, avanzando líneas poco a poco, pero su única ocasión había sido una falta desde el borde del área donde no corrimos peligro. Eso sí, nos costaba contenerlos. 

Los minutos pasaban y las oportunidades no llegaban, al igual que ninguno imponía de forma total su estilo de juego y ambos equipos se preocupaban más del aspecto defensivo que de atacar. El partido que había empezado más animado poco a poco se desinflaba, aunque parecía que los visitantes estaban en un modo más ofensivo que nosotros, pero sin llegar a sorprendernos. Sin embargo, fuimos nosotros los que nos adelantamos en el marcador en nuestra única ocasión. Pedro Casado robaba un balón en medio campo y realizaba un gran pase a Alvaro Huete que estando solo en campo contrario conseguía el 1-0. El marcador ya no era de empate en un partido donde las fuerzas estaban tan equilibradas. 

El gol hizo que el equipo se viniera para delante, incluso tocaba en torno al área contraria, pero sin terminar ninguna de nuestras jugadas lo que unos minutos después, en el 32, nos iba a penalizar. Primero por una jugada ensayada de ellos a raíz de una falta sacada rasa al borde del área que se convertía en córner. Pero ese saque de esquina sí que se convertiría en el gol del empate. Un resultado merecido con lo que se había visto, aunque quizás demasiado premio que ambos conjuntos hubieran marcado un tanto. 

La última gran ocasión antes del descanso corrió de nuestra cuenta, cuando Manuel García en una jugada heroica regateaba a dos defensas contrarias dentro del área y realizaba un buen disparo que tocaba en un defensa para mandar a córner. La verdad es que fue de las mejores jugadas del partido.

La segunda parte empezó como termino la primera, con mucho respeto por parte de ambos conjuntos. Ninguno se hacía con el control del partido y ninguno creaba peligro real a su adversario. Lo más peligroso en los primeros diez minutos de esta segunda mitad corrió de nuestra cuenta, después de que Ricardo Lucio hiciera un buen centro que remataba Víctor Cabrera por encima del arco. 

Parecía que con el paso de los minutos empezábamos a coger la temperatura al encuentro y aunque fuera a balón parado, el equipo estaba realizando buenas jugadas, la mayoría por faltas botadas por César Alonso que encontraba rematador, pero que estos no conseguían acertar a puerta. El problema era que con el balón jugado el equipo de Diego Rodrígues no conseguía filtrar buenos pases ni hacer buenas combinaciones. A los fuenlabreños les pasaba lo mismo. 

En el minuto 25 fueron ellos los que tuvieron una buena ocasión. Uno de sus extremos se quedaba solo frente al portero, pero decidía dar un pase de la muerte que afortunadamente para nosotros se paseaba por el área chica para posteriormente mandar ese balón a córner. Sin embargo, ese saque de esquina sería más peligroso para nosotros de lo que se podría pensar, pues termino siendo una jugada enmarañada dentro de nuestra área con hasta cuatro tiros de ellos que rebotaban en nuestra defensa. 

Cuando el partido parecía que se volvía loco y ambos conjuntos se animaban a atacar sin pensar mucho en defender, a partir del minuto 37 todo ello se paró por faltas realizadas por ambos conjuntos que cortaron el ritmo del encuentro. Aunque estaba claro que cualquiera podía llevarse el gato al agua en un error, o en un mal rebote en cualquiera de estas jugadas a balón parado. 

Al final un resultado de 1-1 justo a todas luces después de lo que se vio en el césped del Urbis. Ambos equipos seguro que no se fueron satisfechos con su juego sobre el terreno de juego sabiendo que podían haber dado más de sí mismos. Ahora toca visitar el Polideportivo Municipal de La Fortuna, un campo que seguro que será difícil por cómo le está yendo la temporada al equipo, pero que puede ser un buen punto de inflexión para remontar la situación.