Al equipo que dirige Raúl León le costó superar la presión de los sureños, pero se mostró más efectivo de cara a portería
Texto y fotos de A. Posilio
Madrid, 27 de agosto de 2015.- El Aficionado B saldó su segundo partido amistoso de la pretemporada con una clara victoria en el marcador, 2-0, que no fue tan rotunda sobre el terreno de juego, pues el Móstoles URJC dominó la mayor parte del encuentro gracias a una fuerte presión, pero no se mostró tan efectivo de cara al marco como lo hizo el conjunto que dirige Raúl León.
El técnico local ha diseñado una pretemporada en la que el trabajo defensivo está llevándose la mayor parte del trabajo, y a fe que se nota, pues la victoria de ayer se debe mayormente a la solidez de la escuadra a la hora de contener al rival. Quedan conceptos por trabajar y automatismo que asentar, pero es evidente que ahora mismo es el punto fuerte de este equipo.
Otra cosa es el aspecto ofensivo, donde el segundo equipo de la Escuela se mostró menos rodado. La fuerte presión que llevó a cabo el plantel del equipo sureño dificultó al máximo la intención de los locales de hacerse dueños del balón. Es más, el Móstoles lo tuvo más tiempo en su poder, lo que no impidió que las ocasiones más claras de gol cayeran del lado del Moratalaz. Así, una insistente presión de los locales sirvió para provocar un error del guardameta azulón, que aprovechó Álex para sumar el primer tanto del duelo.
Los cambios tras el descanso dieron todavía más dominio al conjunto rival, que se acercó con mayor peligro al área de la EDM, pero su falta de acierto impidió el equilibrio en el electrónico. Los morataleños se acercaban con cuentagotas al marco mostoleño, pero en un rápido contragolpe Israel consiguió el segundo tanto, que sentenció el encuentro.
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