- Presentate un poco como entrenador a todos, cuentanos tus experiencias hasta ahora como entrenador y porque le dedicas parte de tu tiempo
Me gustaría comenzar diciendo que una parte de mí siempre fue entrenador, aunque se este convirtiendo en un habito decir esto, por eso no le dedico tiempo a serlo, sino que es una forma de ser.
Me llamo Sergio García Madroñal, empecé en esta profesión de una manera precoz, debido a varias lesiones importantes, que me hicieron mejorar como persona y, por ende, como entrenador.Mi primer equipo fue el Vicalvaro, donde hice practicas sobre la formación deportiva que cursaba por aquel entonces. Enseguida tomé la decisión de ser entrenador y para ello debía formarme.
Tuve la suerte de impresionar o llamar la atención por ser el único rubio de la clase a un gran entrenador, pero sobretodo bellísima persona, Wilson Arias, con la que estuve varios años en el Getafe CF. Las ganas de seguir aprendiendo, esa curiosidad que me impulsa a debatirme todo, hicieron que viviera grandes momentos en un buen club, donde conoces y te retroalimentas de grandes compañeros.
A partir de aquí me gustaría hablar en plural, ya que tuve la suerte de rodearme de buenos profesionales y excelentes personas, las cuales me han llevado hacia esta escuela.
Después de una larga etapa, sentimos la necesidad de evolucionar fuera de nuestra zona de confort, intentando hacernos un hueco en un juvenil de autonómica. La experiencia no fue del todo satisfactoria, por conflictos personales con los dirigentes del club, pero nos hizo valorar otras cosas, que por suerte, debamos por naturales.
Quisimos iniciar una aventura en una sitio con unas ideas claras y una dirección unánime en metodología donde poder desarrollarnos y donde poder sumar, y sabiendo por futbolistas que pasaron por nosotros, amigos al fin y al cabo, como funcionaba esta escuela no queríamos no intentar estar aquí para seguir nutriéndonos como Cuerpo Técnico.
- ¿Cómo ves la Escuela Deportiva Moratalaz ahora que formas parte de ella y cómo la valorabas antes?
Está siendo un año diferente, complicado, pero muy rico desde nuestro punto de vista, ya que nos obliga a estar pensando siempre en posibles soluciones en beneficio del equipo. Siendo conscientes de los limitantes que tenemos, estamos convencidos de que potenciaremos nuestras virtudes y debilidades, y eso se aprecia en cada sesión, en cada charla, en cada mirada de cada uno de los futbolistas, o en cada intervención para resolver conflictos, motivos suficientes para seguir siendo ambiciosos. Ellos saben de la dificultad de esta situación, pero están aprendiendo a poner al grupo por encima de uno mismo. - Este es tu primer año en la EDM, ¿cómo ha sido tu inicio como entrenador en la Escuela?
Estamos encantados de estar aquí, se aprecia la gran unión que hay entre compañeros de profesión, y por encima de todo, los valores, valores de barrio, con los que nos hemos criado y que llevamos por encima de cualquier éxito individual.
A nivel estructural se nota una gran organización, y una razonada amplitud de integrantes, que hacen que sea muy fácil la comunicación equipo-club, desde el jugador hasta los coordinadores.
- ¿Qué objetivos te propones a corto y largo plazo con el equipo y dentro de la Escuela
Finalmente, y siendo fieles a nosotros mismos, seguimos y seguiremos pensando y actuando en dar pequeños pasos para hacer que nuestra labor se convierta en nuestro trabajo, porque así vivimos esta profesión, para no dejar de creer que esa pasión sea el medio del fin.
El Fondo Social Europeo y la Comunidad de Madrid financian el coste laboral de los trabajadores de la entidad Club Escuela Deportiva Moratalaz