El Juvenil A es otro motivo de orgullo dentro de la escuela. El pasado fin de semana volvieron a demostrar de la pasta de la que están hechos tras vencer 2-1 al Getafe CF, un equipo que se halla en la cuarta posición de la clasificación. Todo ello a pesar de estar con un jugador menos desde el 60′ debido a la expulsión por doble amarilla de Marco Lattanzi.
Los nuestros no se vinieron abajo y siguieron luchando y creyendo en la posibilidad de puntuar. Una actitud que se vio premiada en los minutos finales. Corría el 88′ cuando Imanol Rodríguez conseguía alojar el balón en las mallas. El marcador ya no se movería de sitio en el enésimo ejemplo de que a menudo llega la recompensa después del esfuerzo. «Una victoria ante un conjunto que siempre ha ido 3º o 4º que nos va a dar confianza para lo que queda» es el diagnóstico de Charly Rodríguez, el entrenador.
Nuestro sub-19 está teniendo una temporada de altibajos donde se alternan buenos resultados con semanas de no tan buenos. Ejemplo de ello son los cerca de 2 meses que el equipo de Charly no ha sido capaz de alzarse con una victoria. El trabajo estaba ahí pero el triunfo no llegaba. «Sí que es cierto que habíamos conseguido empates positivos contra equipos como el Leganés, las Rozas y el Atleti», refiere el técnico.
Pues bien, la luz al final del túnel ya se ve en las filas del Juvenil A. «Sabíamos que era cuestión de tiempo que llegara un resultado así porque el trabajo de los chicos estaba siendo muy bueno«, expresa Charly. Cabe destacar que el equipo se halla en la Liga Nacional, la segunda división más alta de esta categoría, solo superada por División de Honor, la más conocida de cara al público. Disputados 23 jornadas, es 14º con 24 puntos, 14 más respecto al descenso.
Charly está orgulloso de su equipo: «No tiene nada que ver lo que somos ahora con lo que éramos en la primera vuelta». Todavía restan 11 partidos, un parcial donde quieren seguir demostrando sus virtudes. En palabras de su entrenador, cada vez juegan mejor, tienen más registros y muestran su competitividad en cada encuentro. Los chicos están afrontando una temporada de pleno aprendizaje donde el proceso ha ido claramente de menos a más. La reciprocidad se hace evidente con escuchar a nuestro míster. Ellos confían en Charly y Charly confía en ellos. Sigamos disfrutando y confiando en el gran trabajo que realizan cada semana este increíble grupo de personas.