Una escuadra difícil de vencer
El equipo de la Escuela sumó un nuevo punto gracias a una segunda parte más activa
Alineaciones.
EDM Alevín C: Richi; Arturo, Gonzalo E (Guti, m. 40), Gonzalo R, David, J. Escudero (Canorea, m. 30) Jorge, (Juan B, m. 41), E. Peco (Miguel, m. 43) Tristán, Manu (Andrés m.43) y Alfon.
Aravaca C C. F.: Gonzalo (Roberto, m.30); Santiago (Juan, m.35), Rodrigo, Antonio (Mateo C, m. 40), Jorge, Lorenzo, Lucas (Danie,l m.37), Miguel, Ignacio, Oscar y Mateo G.
Árbitros: Ramos González, Carlos. Mostró tarjeta amarilla a Lucas (m.17), J. María (m. 45), Ignacio (m. 49), Lorenzo (m. 55) y J. María, (m. 58).
Goles: 0-1 (m. 8): Rodrigo; 1-1 (m. 47): Tristán.
Crónica de Alfredo Pascual; fotos de Antonio Canorea
Así es, después de estas cuatro jornadas que llevamos, y a primera vista, observamos que este alevín no se lo pone fácil a sus rivales. Una victoria y dos empates, junto con una derrota, donde se estuvo más cerca de empatar que de perder, demuestran que es difícil vencerlo.
En esta cuarta jornada de liga recibíamos en nuestro campo estrella, el Urbis, en la Dehesa de Moratalaz, al Aravaca Club de Fútbol C, un equipo integrado en su mayoría por jugadores alevines de segundo año.
Después de realizar el sorteo, se decidió jugar a la derecha y que nuestros rivales realizaran el saque inicial, dando comienzo el encuentro. Desde un primer momento, y como viene siendo tónica general en el equipo, salimos un poco dormidos, estuvimos replegados, atrás, sin poder librarnos de este ataque del Aravaca en diez minutos. Debido a un fallo múltiple, encajaríamos el primer gol en el minuto 8. Mejoramos, saliendo tímidamente al ataque, pero las ocasiones no eran claras, no había profundidad en el juego, llegábamos, pero no se creaba ocasión de gol. Lo intentamos a balón parado por motivo de una falta cometida por el Aravaca sobre la frontal del área.
Esto nos daría la oportunidad para empatar, para igualar las posiciones en el marcador. Fue nuestro lateral izquierdo quien se encargaría de ejecutar el tiro. E. Peco golpeó, pero el balón salió alto por encima de la portería defendida por el equipo rival. Y en el siguiente ataque que recibimos, Richi, nuestro portero, realizaría una fabulosa parada, que de no haber sido así, hubiera supuesto el 0-2. Con la tremenda convicción de poder remontar este resultado, nos encaminamos hacia los vestuarios, cuando el árbitro pitó el final de esta primera parte.
Salimos al campo, la segunda parte iba a comenzar, colocados en nuestras posiciones. Tuvimos que esperar a que el Aravaca saliera del vestuario para que diera inicio. El Morata estuvo mucho más activo e intenso en esta segunda parte, Guti, que entraría en el minuto 40, corrió la banda derecha en busca del ansiado gol que nos devolviera la tranquilidad.
Todo este ataque en su conjunto produjo las acciones necesarias para que el equipo dispusiera de más ocasiones de peligro, y en el minuto 47, Tristán dispararía desde fuera del área, anotando el empate en el marcador. El equipo blanquiazul se venía abajo por momentos, el incesante ataque de la Escuela, por conseguir el gol que le proporcionara la victoria en este encuentro, cada vez iba a más. El juego se endureció, cortaron todas nuestras jugadas con faltas. Tres jugadores del Aravaca, vieron la cartulina amarilla, sin mencionar a su técnico, que vio la segunda amarilla, lo cual le supuso la inmediata expulsión del terreno de juego.
Éramos incapaces de dar más de dos pases seguidos sin recibir una falta. Las jugadas quedaban interrumpidas, el partido estaba roto y nosotros, que no pudimos adecuarnos a este tipo de juego, no pudimos progresar, y marcar de nuevo. No tuvimos ningún fallo más, tampoco acertamos sobre la meta contraria, así que el encuentro finalizó en tablas.
Debemos seguir teniendo confianza y creer en nosotros mismos. Somos un equipo difícil de vencer.
¡¡¡¡VAMOS MORATA!!!!