Tras un año parado por una lesión en el hombro, el jugador de nuestro Aficionado B Daniel Valverde vuelve a ponerse las botas para saltar al terreno de juego. Lo hizo el pasado domingo en la espectacular victoria del equipo ante el CD Canillas B.
Hemos podido hablar con él para que nos cuente que sensaciones ha tenido al volver al vestuario:
– ¿Qué se siente al volver a jugar en un campo de fútbol después de tantos meses?
Fue una sensación muy rara. Me temblaba todo el cuerpo, pero, a la vez, estaba muy contento. Me hizo muchísima ilusión volver a vestirme de corto y ver a mis compañeros desde el campo, a mi lado, y no desde la grada.
– ¿Cómo ha sido su vuelta al terreno de juego?
Podría haber sido de otra manera. No puedo quejarme, tuve sensaciones muy buenas, aunque todavía me toca trabajar mucho. Lo más importante es que alcanzamos la primera victoria de este año y me he vuelto a sentir futbolista.
– ¿Cómo le han recibido sus compañeros y el míster?
Me han recibido con los brazos abiertos. Se han preocupado desde el primer día como iba mi recuperación y me han hecho sentir uno más del grupo. Tengo muy buena relación con todos ellos.
“Me he vuelto a sentir futbolista”
– Tras tanto tiempo sin pisar el terreno de juego, ¿le está costando adaptarse al ritmo de los partidos y entrenamientos?
Sí, me está costando mucho. Es lo normal después de tanto tiempo sin jugar. Ahora lo que tengo que hacer es trabajar en cada entrenamiento y aprovechar todos los minutos de juego que me dé el míster para alcanzar el nivel óptimo.
– ¿Cómo reaccionó al conocer el alcance de su lesión?
Lloré muchos días de la impotencia y de la rabia que me daba no poder hacer nada. En cuanto se me dislocó el hombro, ya me temía lo peor. Pero no era así, lo peor aún no había llegado. Pensé que sería una recuperación sencilla de un par de meses o tres y que con rehabilitación estaría preparado para jugar enseguida. Pero no fue así. Al mes de lesionarme, visité a un traumatólogo y, después de ver mis radiografías y hacerme unas cuantas pruebas de movilidad, me dio dos opciones: la primera era no operarme y vivir con el riesgo de que se me volviera a salir el hombro con cualquier movimiento que hiciera, lo que supondría dejar el fútbol de forma definitiva y la segunda era operarme y estar unos cuantos meses de recuperación. Sin pensármelo dos veces, me decanté por la segunda opción.
– Durante su lesión, ¿pensó en dejar el fútbol de forma definitiva?
No, en ningún momento. Ha sido un año lleno de altibajos, de sufrimiento y de duro trabajo, pero jamás se me pasó por la cabeza abandonar este deporte. El fútbol es mi vida. El día que me retire, será cuando mi salud me impida practicarlo.
“Jamás pensé en dejar el fútbol, este deporte es mi vida”
– ¿Qué es lo que le motivó a seguir trabajando para recuperarse y volver a jugar?
La ilusión que tengo de triunfar en este deporte. Es muy difícil pero no hay nada imposible. Siempre hay que luchar por nuestros sueños y no rendirnos nunca.
– ¿Con qué momento de su paso por la EDM se quedaría?
Sinceramente y aunque parezca extraño, con el momento de mi lesión. Estuve unas cuantas semanas llorando todas las noches porque aún no me creía que se me hubiera vuelto a dislocar el hombro. Me sentí muy arropado por toda la gente. Recibí muchas muestras de cariño en ese momento tan duro para mí. Soy muy afortunado al poder jugar al fútbol y tener personas tan especiales a mi lado: mi familia, mis amigos, compañeros, entrenadores… Todos ellos han hecho posible mi vuelta. Con este tipo de lesiones, te das cuenta de lo que tienes y aprendes a valorar mucho más las cosas en tu día a día.