Crónica | Infantil A – EFMO Boadilla A

Crónica | Infantil A – EFMO Boadilla A

DERROTA INESPERADA

El Infantil A de Carlos Rodríguez es uno de los mejores conjuntos de la Escuela. Actualmente marcha quinto en la clasificación con 33 puntos tras 21 partidos jugadas en División de Honor. Este fin de semana, tenía a priori un partido fácil ante E.F.M.O. Boadilla A, un rival que hasta ese momento tenía 23 puntos y que no había rendido al mismo nivel que los nuestros, sin embargo, nada de eso se notaría sobre el césped del Urbis, al menos en la segunda parte, pues la primera sí que fue un monologo de los locales.

El partido empezó de manera trepidante con una gran oportunidad de Marcelo Antonio después de que todo el equipo presionara, y recuperará, el saque de centro de los boadillanos. En el minuto 6, después de ese susto, los visitantes empezaron a estar mejor en el terreno de juego, cerrados en defensa, mientras que nosotros sabíamos que teníamos que hacer, que no era otra cosa que tocar y tocar (algo que tenemos en nuestro ADN), con Kevin siendo el líder de la zaga. 

Al final con paciencia, el equipo conseguía abrir huecos sobre la defensa rival. En el minuto 8 Enzo Fernández tras un buen juego de toque del equipo realizaba un disparo desde la frontal que hizo al portero del Boadilla esmerarse para detenerlo. En el minuto 10 Aitor Ontañón encontraba en la esquina izquierda del área a Izan Moran que tras revolverse dentro del área sacaba un buen disparo que se iba desviado. 

Pero quizás la jugada más peligrosa, sería también la más extraña. Corría el minuto 12 Adrián presionaba un balón al portero de los visitantes, que se liaba y al despejar el balón rebotaba en el 19 que a punto estuvo de colarse dentro del marco, solo el larguero evito el tanto que hubiera abierto el marcador. 

A partir del minuto 17 se podía ver como el partido cambiaba un poco de fase, y es que, a pesar de nuestro dominio, que era claro, el equipo zozobraba un poco cuando sus rivales nos presionaban en nuestro campo, impidiendo que saliéramos con el balón controlado. Aunque lo mismo les ocurría a ellos. El partido entraba en una dinámica donde los parones se sucedían y las emociones de los primeros minutos habían pasado a la historia. A pesar de ello el Moratalaz hasta el descanso tuvo dos buenas oportunidades, la primera de un córner que Moises Sandoval remataba fuera y la segunda de Izan que conseguía disparar a puerta algo forzado, pero sin premio alguno.

El descanso parece que no le sentó nada bien a los nuestros, y es que el equipo en la segunda parte salió bastante dormido, con varios fallos defensivos, impropios del conjunto de Carlos Rodríguez. Uno de estos errores fue antes de cumplir el tercer minuto de juego, y acabó con un centro de ellos al segundo palo que nuestro portero no atinaba a coger el balón y el rechace era aprovechado por uno de sus delanteros que tras rematar en el larguero terminaba marcando el 0-1.

El partido se puso de cara para ellos, pues después de lo visto en la primera parte, lo único que tenía que hacer era mantener la ventaja. Sin embargo, el gol hizo mucho daño moral a nuestro equipo que ahora no atacaba con criterio, solo con balones largos buscando tener suerte, mientras que los rivales cada vez se encerraban más en su campo, como era de esperar.

A pesar de ello, el Moratalaz aún tenía algunas oportunidades, como en el minuto 12 cuando Enzo regateaba a dos jugadores contrarios en la frontal del área y realizaba un buen chut que se paraba el portero de Boadilla. 

Pero la realidad era que con el paso de los minutos se veía que el equipo no estaba jugando bien. El equipo no encontraba la calma necesaria para jugar con calma, a la par que ellos conseguían llevarse todos los rechaces porque estaban mostrando más intensidad. Tanto fue así, que en el minuto 26, el equipo visitante, con una buena presión alta sobre Rubén Martínez, recuperaba el balón en área contraria, y tras tres toques conseguían anotar el segundo tanto del partido. Un gol merecido después de lo que se estaba viendo en el campo. 

Con el gol en contra, el equipo empezó a jugar todavía peor. El equipo no conseguía combinar ni encontrar huecos, y si lo conseguíamos corríamos el problema de que nos sorprendieran a la contra o con un balón largo. Además, cada uno realizaba la guerra por su cuenta, como si el fútbol fuera un deporte individual. 

El resultado final del encuentro fue de 0-2. Un marcador que en la primera parte parecía impensable con el juego mostrado, pero que tras el descanso muestra claramente lo que ocurrió, y es que el Infantil A fue el Titanic después de chocar con el iceberg, con los jugadores sin saber reaccionar ante el gol en contra. Sin embargo, toca dejar de lamentarse y pensar en el siguiente partido, que será fuera de casa contra la Escuela de Fútbol Valdemoro A, una escuadra a la que sacamos tan solo 4 puntos y que es un buen rival para distanciarnos de la zona media de la tabla.