Crónica del amistoso entre Real Madrid Alevín A 0 – 2 EDM Infantil B

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Asalto a Valdebebas

La EDM poco a poco se va igualando con los equipos más grandes de la Comunidad

Alineación:

EDM Infantil B: Mario (31´), Iván (31´), Cerrato, Diego (31´), Andrés (31´), Pablo, Javi (31´), Hugo, Carenas (31´), Saguar (31´) e Iker.

 Suplentes: Munill a(31´), Checo (31´), Alberto (31´), Felipe (31´), Juanma (31´), Lucas (31´), Baena (31´).

Crónica de Miguel Ángel Moreno

Se enfrentaba el Alevín A del Real Madrid contra el Infantil B de la Escuela en encuentro amistoso. El partido empezaba con una ocasión del Real Madrid que se va fuera de la portería. Pronto, la Escuela pudo ver que no le iban a regalar nada, y viendo la progresión de los chicos las últimas semanas igualaron pronto en intensidad el partido. El Moratalaz se encontraba muy compacto y dejaba pocos huecos al Real Madrid, que no conseguía llegar con claridad. A los 8 minutos de empezar, en un robo de balón de la defensa de la Escuela y un rápido contragolpe, el delantero consigue batir en un bellísimo gol a la escuadra de la portería. Esto no acababa de comenzar, ya que hubo varias ocasiones para que el equipo local empatara, pero una gran defensa de todo el conjunto lo impidió. Las ayudas y las coberturas continuas ahogaban a la escuadra local. La Escuela pudo aumentar también el marcador, pero la buena colocación del Real Madrid dificultaba los espacios.

La segunda parte comienza con los dos equipos jugando de igual a igual. El Real Madrid origina varios córneres, que provocan peligro en la meta visitante. Esto causa que a la Escuela le cuesta salir de su campo, pero cada vez que lo hacía, era con mucho peligro. Poco a poco, el Moratalaz, con un gran desgaste, se hace con el medio del campo, hasta llegar a la portería rival. Es aquí cuando sube líneas y empieza a presionar en campo contrario. La presión hace pensar que un robo puede ocasionar el 0-2 y dejar casi sentenciado el partido, ya que el Real Madrid estaba volcado para conseguir el empate. Y así fue: en un robo en el centro del campo llega el balón al área, y desde un lateral, el centrocampista morataleño saca un gran golpeo, ante el que nada puede hacer el portero local. De aquí hasta el final no se originó ninguna jugada de peligro.