Crónica | Cadete B – Rayo Vallecano ‘B’

Crónica | Cadete B – Rayo Vallecano ‘B’

EL CADETE B AGUANTA UNA HORA DE PARTIDO ANTE EL RAYO VALLECANO B

La mañana transcurría fría, desangelada y sin ninguna voz más alta que otra. Apagada. Todos los presentes miraban más el cielo encapotado de este invierno que se resiste a marcharse y compartía sus miedos por el acto de presencia de la lluvia para abrir los paraguas con el posible castigo duro que podía infligir toda una cantera como el segundo cadete del Rayo Vallecano frente a un conjunto, el Cadete “B”, que arrastraba un bagaje preocupante de un punto sobre los últimos 21 posibles. Hasta que agarró el esférico César Alonso….

Partiendo desde banda derecha y viniéndose hacia el centro, el 22 morataleño se abrió paso, cual Robinson Crusoe en plena expedición por África sorteando obstáculos y rivales, para adentrarse en el área y, con la pierna derecha, ajustar el balón al palo para empatar el encuentro a uno justo cuando el árbitro de la contienda se llevaba el silbato a la boca para decretar el descanso.

Fue el imprevisto final a una primera parte donde, salvo una genial apertura de tiralíneas en parábola de Fali, el protagonista absoluto fue nuestro cancerbero Álex quien se hartó a detener un sinfín de lanzamientos a la cepa de su poste izquierdo pero que se llevó la ovación de la mañana en una doble parada heroica y salvadora cuando transcurría el ecuador de la primera parte. No pudo hacer nada, cuando en el minuto 5, y tras una acción a balón parado, Oltra se aprovechó de un esférico tan muerto como suelto para adelantar a un Rayo Vallecano B que también pudo incrementar su ventaja poco después en un remate del visitante Julio González cuyo cabezazo se paseó por nuestra portería tras un centro medido de Jaime.

En cualquier caso, la segunda parte amaneció de otra manera y con la premisa muy clara por parte de nuestros jugadores. Sin renunciar a la combinación en la salida de balón y sin abusar tampoco del juego directo, tocaba apretar los dientes, defender de manera disciplinada, juntar líneas y salir a la contra dándole toda la responsabilidad de juego al Rayo Vallecano B. Había que jugar con las urgencias y la imperiosa exigencia de ganar de una cantera que venía con necesidad en la clasificación. Jugar con su estado mental deportivo. 

Unas prisas que pudieron ser mayores por su parte si en el minuto 45, Sebas le hubiera dado más contundencia a la pelota con su cabezazo o si, poco después, a Horca no se le hubiera anulado un gol por fuera de juego para poner en franquía el marcador. El plan se estaba ejecutando pero, a poco más de cuarto de hora para la conclusión y sin haber sufrido excesivo agobio hasta el momento, una acción por banda izquierda del franjirrojo Jaime sirvió en bandeja al recién ingresado Rodri para empujar a gol. Ello trastocó el guión impuesto por Diego Rodrigues sentenciando Israel con un golazo por la escuadra desde fuera del área dejando el marcador en el definitivo 1-3.

Quedan todavía muchas jornadas para revertir la situación, 13 para ser más exactos. Dos victorias consecutivas no solo te meten en la pelea por salvar la categoría sino que además te otorgan esa confianza para creer que los objetivos son posibles. Le has plantado cara a todo un Rayo Vallecano B, ¿por qué no vas a poder hacerlo ante rivales más directos? ¿Acaso no vas a poder mirar de frente y a la cara la próxima jornada contra un rival tan potente como el Getafe B, que se te escapó vivo en la primera vuelta en el Urbis? Claro que puedes.

Diego Rodrigues, entrenador del Cadete B, nos atendió, como siempre amable, a la finalización del partido y achacó la derrota al desgaste físico: “Hemos aguantado una hora pero la segunda parte se la hemos regalado. El primer tiempo sí ha estado más disputado y en el que hemos intentado trabajar dos fases. La primera con balón siendo fieles a nuestro estilo, combinar, llegar al último tercio para generar ocasiones. Y una segunda si balón donde teníamos que estar más cerrados para evitar que apareciese la calidad de sus jugadores ya que ellos son una cantera y tienen recursos que nosotros no tenemos, pero nos ha faltado gasolina para el achique de espacios, y cuando se han puesto por delante no hemos tenido capacidad de reacción”.

Analizando el segundo tiempo con mayor profundidad, el preparador portugués coincidió en que la reanudación del encuentro sí fue positiva: “Es verdad que nosotros llegamos bien a la segunda parte por el gol que marcamos antes del descanso, les ha costado entrar porque nosotros hemos modificado algunos ajustes en la presión con el fin de que no tuvieran fluidez en su circulación. A la espera también de cazar alguna ocasión como la que hemos tenido con el gol anulado o el cabezazo de Sebas en un corner. Pero al final un momento de desatención te condena contra este tipo de equipos, y tras el gol hemos perdido la organización defensiva y no hemos podido reaccionar”.

Para finalizar, Diego Rodrigues quiso destacar que el Cadete “B” venía en una línea positiva, no de resultados pero sí de sensaciones futbolísticas, a pesar de cosechar 1 punto de 24 posibles aunque reconoció que “estamos en una situación muy complicada”: “En los dos últimos partidos ocurre que nos empatan en el último minuto; y contra el Trival, líder, nos endosan un 3-0 bastante engañoso porque competimos bien, que hacían que hoy viniésemos con moral”; aunque fue crudo con la realidad: “Cualquier error te penaliza mucho más que en otro momento de la temporada. Ahora hay que afrontar todo como finales. La próxima jornada vamos a Getafe, otro de los líderes de la categoría y un campo muy complicado. Aquí logramos ponerle las cosas difíciles y con esa mentalidad hay que viajar: lograr una victoria importante que nos dé ese punto de inflexión para el resto de la temporada”.