Las plantillas de los conjuntos A, B y C ya están definidas, mientras que las del D y E entrenarán un par de semanas juntas para determinar el nivel de los jugadores
Texto y fotos de A. Posilio
Madrid, 13 de septiembre de 2016.- Los cinco equipos prebenjamines de la EDM estrenaron la tarde de ayer la temporada 2016-2017 con suaves entrenamientos en el Lili Álvarez. La ilusión de los alrededor de sesenta jugadores que acudieron a la presentación fue patente desde el primer minuto, pues la alegría por ver a los amigos del fútbol del año pasado fue patente en una gran parte de los jugadores. Solo a los nuevos se les veía un poco más tímidos que a sus compañeros.
Antes de iniciar la actividad, los padres se reunieron con Elías García, el coordinador de Iniciación, quien les explicaba cómo se va a desarrollar el curso deportivo. La primera reunión tuvo lugar con los familiares de los prebenjamines D y E, con los que el responsable de los equipos pequeños de la Escuela insistió en que, de momento, estos dos conjuntos entrenarán juntos, para ver el nivel de los chicos, lo que determinará en qué equipo juegan.
Prácticamente la mitad de estos futbolistas, todos de primer año, son recién llegados a la Escuela, mientras que la otra mitad ya participaron la temporada pasada en chupetienes. Pero como explicó Elías García, «en estas edades cambian muchísimo de un año a otro y hay que evaluarlos a todos de nuevo. En esta Escuela hacemos como en las clases de inglés, a cada niño se le pone en la que tiene su nivel más próximo. Es la mejor forma de que aprendan. Por lo menos es lo que pensamos aquí, y así actuamos».
Durante estas reuniones previas, los padres reciben instrucciones sobre el uso de la cuenta de Whatsapp que tienen conjuntamente para estar al día, así como dónde tienen que recoger la ropa y firmar la ficha, entre otras cosas. Además, Elías hizo gran insistencia en la necesidad de puntualidad en entrenamientos y partidos, por respeto a todos, así como en que se avise lo antes posible al entrenador cuando un niño no pueda acudir, «por respeto al trabajo del entrenador». «Los técnicos planifican los entrenamientos dependiendo de la cantidad de jugadores de los que vaya a disponer. Y una ausencia inesperada puede fastidiar varios ejercicios», explicó el coordinador de Iniciación.
Además, Elías pidió a todos los familiares, tanto en la primera reunión como en la segunda con los de los prebenjamines A, B y C, «paciencia y comprensión», porque las obras que está sufriendo el Urbis hacen que los 38 equipos de la Escuela tengan que entrenar en el Lili Álvarez. «Por eso puede que durante las dos próximas semanas no podamos entrenar los dos días estipulados».
Prebenjamín A
El equipo dirigido por Álvaro Cabezuelo, ayudado por Alberto Gómez, está integrado casi en su totalidad por 13 jugadores que el año pasado formaron en los prebenjamines C y D, más un fichaje de fuera, por lo que todos son chicos de segundo año, que ya conocen la competición, pues el año pasado quedaron segundos en su campeonato. En esta categoría todavía se desconoce cuándo empieza la liga, la sede dónde jugarán los distintos clubes y el calendario.
A pesar de todo, el técnico tiene claro para qué vienen estos chicos a jugar al fútbol: «Para disfrutar». «El único objetivo que nos planteamos en estas edades tan tempranas es que se diviertan y sigan viniendo cada día con mucha ilusión», indica. Aunque tampoco se olvida de que otra de las razones de su presencia en la EDM es que aprendan: «En prebenjamines se trabaja lo básico, conducción, control, pase y tiro. Por lo que conozco de este grupo, sus integrantes son bastantes hábiles con el balón y creo que voy a poder trabajar con ellos algunos conceptos más complicados. Los vi jugar el año pasado y tienen algunos conceptos muy bien asimilados».
Para el preparador madrileño de 25 años, «lo más gratificante de entrenar a niños tan pequeños es que al final de temporada se puede comprobar que han aprendido muchísimo».
Prebenjamín B
Sergio Fernández es el técnico de este equipo, que cuenta con la ayuda de Berni Rodríguez. Ambos dirigirán a una plantilla de 14 jugadores, que proceden casi enteramente de los equipos prebenjamines de la EDM del año pasado, por lo que todos son de segundo año, incluidos los dos nuevos. El año pasado, el Prebenjamín B quedó en un magnífico tercer lugar en su competición.
«El puesto da igual, y más en estas edades _ afirma el preparador _. Lo único importante es que se diviertan y lo pasen bien. Es esencial que vengan a cada entrenamiento con una sonrisa, y que el día que no haya entrenamiento, se enfaden». Para este joven preparador, ni siquiera el aprendizaje técnico tiene mayor trascendencia en estos momentos. «La clave está en la pasión que tengan por el fútbol, que tengan ganas de venir a entrenar. Si casi no pueden ni con el balón. Más que a tocar el balón o a hacer un regate, tienen que aprender a ayudar a los compañeros, a que no sean egoístas, a pasar el balón, a ser un buen compañero. Es decir, les tenemos que enseñar valores morales».
Y para poder evaluar a final de temporada si estas enseñanzas han sido efectivas o no, Sergio expone un ejemplo muy gráfico: «Si estás en un centro comercial y ves a alguno de tus chicos con sus padres, y este se suelta de su mano y viene a darte un abrazo, es que has hecho un buen trabajo. Si se esconde y se hace el loco, tienes que plantearte que algo has hecho mal».
Prebenjamín C
Esta es la única escuadra que tiene a jugadores de primer y segundo año mezclados. Incluso absorbe a chicos que deberían estar en otros equipos, pero que no pueden acudir los días establecidos de entrenamiento. Por eso su plantilla todavía no está completa. Así, en su estreno no llegaban a una docena de futbolistas. Una gran parte ya estuvo en la Escuela el año pasado y otros son nuevos.
Álex Carballo, su responsable técnico, reconoce que una parte importante del trabajo diario va encaminado a que los peques no corran todos detrás del balón: «El objetivo es que aprendan mucho, tanto técnicamente y como a colocarse en el campo. A estas edades tan tempranas es muy importante el trabajo de tecnificación que se hace con ellos». En cuanto al aspecto técnico, resalta que el trabajo que realizan es básico: control, pase, regate y conducción, y que dominen ambas piernas.
«Es complicado evitar que todos corran detrás de balón. Hay que enseñarles que tienen que guardar su posición, pera esta tampoco es fija, pues tienen que probar en todas, tienen que experimentar cuál le gusta más, para que decidan cuando sean más mayores. A base de trabajar, se logra que mantengan su sitio». El sistema que utiliza el preparador gallego para comprobar al final del curso si han mejorado, es evidente: «Se nota a simple vista. Si se comparan los primeros entrenamientos con los últimos, no parecen los mismo niños».
Prebenjamín D
«Lo que llena a un entrenador en estas categorías es ver cómo de rápido evolucionan los chicos, ver cómo disfrutan y cómo van aprendiendo». Así de claro es Nacho Andrés, el responsable técnico del Prebenjamín D, a quien acompaña Juan Alonso en el banquillo. La plantilla de este conjunto está todavía sin definir y durante las primeras semanas entrenará junto con la del Prebenjamín E. Prácticamente la mitad de los integrantes son de primer año y ya conoce la EDM por haber jugado la campaña pasada en los chupetines. La otra mitad es nueva.
En cualquier caso, la opinión de Nacho Andrés es concluyente: «Siendo tan pequeños, lo importante es que se diviertan y que aprendan. Y en este segundo caso, más valores y disciplina que cuestiones técnicas». Pero precisa que también mejoran mucho jugando al fútbol: «Aprenden técnica y algo de táctica, a parar el balón, a chutar, a pedírserlo al compañero y a hablar con el resto». También es de los que piensan que impedir que todos corran detrás de la pelota lleva tiempo y trabajo, «pero poco a poco se van dando cuenta de que eso no se hace», enfatiza.
Sobre la evolución de sus pupilos, es conciso: «Al final de temporada comparo cómo empezaron y cómo juegan, y es fácil comprobar su evolución. Normalmente mejoran tanto técnica como tácticamente; ganan fuerza y crecen entendiendo el juego».
Prebenjamín E
Esta escuadra está en el mismo caso que la del Prebenjamín D, con chicos de primer año cuya mitad es nueva en la Escuela y la otra mitad recién llegada. Álvaro del Rosario es su primer entrenador y todavía está sin decidir quién será su ayudante.
Este joven técnico enumera algunos de los aspectos técnicos que va a trabajar desde el principio con sus nuevos pupilos: «Controles, pases, regates, conducción y jugar combinativamente, que es el sello de esta Escuela y se enseña desde el principio». Pero como el resto de entrenadores, resalta que lo importante es que se lo pasen bien y aprendan, «sobre todo a ser un buen compañero y a trabajar en equipo». Y añade: «Tienen que empezar a ser responsables de sus actos y empezar a coger los hábitos de un deportista».
Del Rosario destaca que, para él, lo atractivo de la actividad que realiza es «ver cómo aprenden». «Cuando al final del año ves cómo son capaces de enlazar una buena jugada o como al equipo que le costaba ganar o meter un gol, lo logra, la alegría es máxima». Y concluye: «Son esponjas y suelen aprender mucho. Se nota casi de un partido a otro».