Este defensa madrileño formado en la EDM se rompió el quinto metatarsiano en el segundo entrenamiento con su nuevo equipo
A. Posilio
,El Primer Equipo tiene un nuevo lateral izquierdo. Daniel Cañón Zúñigsa, madrileño de 21 años residente en Moratalaz, regresa a la Escuela cuatro años después de abandonarla camino del Leganés, donde jugó un año en el Juvenil A y dos en el segundo equipo pepinero, para conocer las mieles y las hieles de Tercera División el curso pasado en el Inter Madrid.
«He venido aquí porque tengo muchos amigos en esta Escuela. Hablé con Jorge Vallejo y al final decidí venir. Jorge me había pedido varias veces que volviera a la EDM, y al final acabé viniendo», señala este fornido defensa, para quien jugar de nuevo en Preferente, tras haberlo hecho en Tercera, no es un paso atrás: «Da igual eso. Si no te dan la oportunidad de tener minutos en Tercera… es mejor tener minutos y dar un paso atrás de categoría para poder disfrutar».
La última campaña no ha dejado un buen recuerdo en este defensa, que prefiere moverse por el lateral antes que por el centro, donde ha jugado varios encuentros, pues incluso reconoce que pensó en dejar el fútbol. Pero la nueva llamada de la EDM y volver a verse rodeado de compañeros que le estiman, le han devuelto la alegría: «Sé que aquí hay compañerismo. Esto no es un equipo, es una familia. Lo sabía y lo he vuelto a comprobar».
Se define como un lateral izquierdo «con recorrido, fuerte y con buena salida de balón», y admite que es otro gran admirador del fútbol de toque que se practica en esta Escuela: «Soy partidario de este estilo. Lo he echado de menos. En Tercera hay muy pocos equipos que intenten jugar al toque. Estoy deseando volver a jugar así». Y aunque reconoce que, como defensa fuerte, le gusta el contacto y el choque, cuando sale al ataque se identifica con sacar el balón controlado desde su portería.
Sin embargo, no ha tenido mucha suerte en su regreso a la EDM, pues en el segundo entrenamiento con sus nuevos compañeros sufrió una desafortunada lesión, que le ha apartado de la actividad durante un par de meses: » Tito intentó regatearme y yo solo me rompí el quinto metatarsiano, sin contacto alguno. No me han dicho nada de operar, solo me han escayolado. Espero recuperarme bien y no volver a recaer. Me dijeron que debía estar seis semanas con la escayola y luego la rehabilitación. Espero estar de vuelta lo antes posible».
Y para finalizar, deja muy claro por qué ha vuelto a su casa: «Mi objetivo aquí es ascender a Tercera, luchar para estar lo más arriba que se pueda y aportar lo máximo a este equipo».
