Jonathan Velasco, jugador que lleva más años en la EDM y ahora en el Primer Equipo

“El fútbol no es nada justo, le das mucho más de lo que te da”

Este joven madrileño ostenta el título honorífico de ser el jugador en activo con más años en esta Escuela, nada menos que 19 temporadas, y es de los pocos que reconocen que no es fan del fútbol combinativo

•  “Esta Escuela es parte de mi vida, es donde más amigos he hecho, y cuando lo deje, seguro que me sentiré muy raro”

• “Cuando llegué, hicimos un gran equipo de amigos, formamos una piña muy unida durante muchos años y éramos como una familia”

• “El día que deje el fútbol será como dejar una parte mía aquí; después de mi familia, esto es lo que más me ata”

• “Lo mejor de esta Escuela es que confían en la gente de aquí y te dan oportunidades que en la mayoría de otros clubes no te darían”

• “Lo que más cambió con el nuevo estilo de juego fueron las pretemporadas, ahora se hacen con balón y antes eran a base de correr por el parque”

• “A las hornadas más jóvenes no les gusta que les mande, porque chillo mucho en el campo y parece que les estoy echando la bronca, pero es al revés”

Texto y fotos de Alejandro Posilio

Este joven madrileño de 25 años tiene el título honorífico de ser el jugador en activo que más tiempo lleva en la EDM, nada menos que 19 temporadas consecutivas defendiendo los colores de esta Escuela. Comenzó en prebenjamines del Club Deportivo Moratalaz, cuando los equipos mezclaban a niños de diferentes edades, ha pasado por todas las categorías y cumple su séptima temporada en el Primer Equipo. Como no le gusta estudiar, dejó el colegio tras aprobar el graduado escolar y se dedicó a trabajar, primero como jardinero y después como transportista. Afectado por la crisis económica,ahora lleva el bar del Lili Álvarez, pues esta opción le ha servido para conseguir algunos ingresos y poder seguir entrenando. Sincero y conciso, es de los pocos miembros de la Escuela que reconocen que no es fan del fútbol de combinación que se practica, pero porque no se ve dotado técnicamente para llevarlo a cabo correctamente. De hecho, asume que tiene que seguir mejorando en la salida del balón. Madridista de los pies a la cabeza, disfruta estando con su familia y viajando. Su máxima ilusión en estos momentos es poder irse a vivir con su novia.

Eres el jugador en activo en esta Escuela que más años lleva formando parte de sus equipos. Nada menos que 19 temporadas. ¿Qué significa esto para ti?

Un orgullo estar aquí tantos años y que todos los entrenadores por los que he pasado hayan confiado en mí. Todo esto hace que sea fiel a este equipo.

¿Qué significa para ti esta Escuela?

La ilusión y el fútbol. Desde pequeñito quería jugar al fútbol y fue el primer club en el que me apunté, y en el que espero retirarme.

Eso es algo que no suele pasar, haber jugado toda una larga vida deportiva en un mismo club.

Sí, es muy difícil, pero es la realidad. Esta Escuela es parte de mi vida, es donde más amigos he hecho y es un modo de vida que se hace habitual. Sé que todos los martes, jueves y viernes tengo que venir a entrenar, y ya es una rutina. Y cuando lo deje, seguro que me sentiré muy raro.

¿Hay algo, aparte de tu familia, a lo que le hayas dedicado tanto tiempo de tu vida?

No, ni a los estudios.

¿Cuándo empezaste en esta Escuela y por qué?

Tenía seis años cuando me apunté al Club Deportivo Moratalaz, y ahora tengo 25, por lo que esta temporada suma 19 seguidas aquí. Era mi ilusión y mi padre hizo todo lo posible por apuntarme. Conocíamos esta Escuela porque viviamos en Moratalaz, pero  luego nos fuimos a Mejorada, y fue cuando me apunté. Seguíamos viniendo porque aquí reside mi abuela.

¿Dónde empezaste a entrenar?

En el campo de tierra del Urbis, en el que estaba arriba. Hicimos un gran equipo de amigos, formamos una piña muy unida durante muchos años y éramos como una familia. Los jugadores nos hicimos muy amigos y los padres también.

Después de 19 años aquí, ¿cómo defines la experiencia?

Es una etapa importante de mi vida. El fútbol para mí ha sido todo y me ha servido para conseguir mis mejores amigos. Con algunos de los que empecé a jugar con seis años sigo teniendo contacto, por ejemplo, Álvaro, Luis Cañón, Alberto… Y el día que deje el fútbol será como dejar una parte mía aquí. Después de mi familia, esto es lo que más me ata.

¿Por qué no has cambiado de club?

Siempre he dicho que si ningún otro club venía a ficharme, no me iría de aquí nunca. Y como no he recibido ofertas, pues aquí sigo. Para qué voy a cambiar si aquí estoy a gusto. Es como cuando estás en un trabajo a gusto, ¿para qué cambiar?

Si hubiera venido algún club a ficharte, ¿qué hubieras hecho?

No lo sé, a lo mejor me hubiera planteado irme. Pero, hoy por hoy, ya no me iría a otro club.

¿Ha cambiado mucho la EDM desde que llegaste?

Sí, mucho. Realmente no me acuerdo de mis inicios, porque era muy pequeño y han pasado muchos años. Pero antes era una organización más familiar, nos conocíamos casi todos. Sin embargo, ahora los niños van más a su bola. Ahora hay muchos más niños que antes y es mucho más difícil conocerse. Además, antes el Primer Equipo era una referencia, ahora no lo es tanto; antes había un equipo como mucho por categoría, incluso jugábamos mezclados. He jugado en el mismo equipo con Alonso, que ahora es mi compañero y soy dos años mayor que él.

¿Qué recuerdas de esa época inicial?

Tuvimos un entrenador que fue maravilloso, Raúl Cardoso, que también jugó en el Aficionado A. Fue la mejor etapa de fútbol que he vivido. Éramos una piña y todos los años quedábamos primeros o segundos. Fue así hasta cadetes.

¿Recuerdas cuándo empezaste a jugar en hierba?

Antes de que hicieran el campo de hierba artificial en el Urbis, jugué en hierba en el de Coslada, El Olivo. Todos los equipos querían tenerlo como rival en la liga para jugar en hierba. Luego, creo que en cadetes, comenzaron las obras en el Urbis y esa temporada nos mandaron a jugar a La Elipa. Nuestra casa era Tajamar, donde también jugábamos en césped. Estuvimos allí una temporada entera.

¿Qué es lo mejor de la Escuela para ti?

Que confían en la gente de aquí y te dan oportunidades que en la mayoría de otros clubes no te darían.

¿Qué hay que mejorar?

Como no he estado en ningún otro club, no sé qué cosas pueden hacer falta aquí que no haya ahora.

¿Cuál es tu mejor recuerdo?

Cuando me apuntaron a la Escuela. Era mi ilusión y, gracias, a Dios, mis padres pudieron apuntarme.

¿Recuerdas cuánto se pagaba en esa época?

No, ha pasado mucho tiempo.

¿Has vivido algún ascenso?

Sí, bastantes. Al principio estábamos siempre ganando, casi era una rutina, y cuando perdíamos, nos cabreábamos.

¿Recuerdas cuáles?

En cadetes subimos los dos años que jugué, en juveniles creo que fue a Autonómica, y en aficionados, de Primera a Preferente.

¿Tu peor recuerdo?

Cuando nos separaron a todos los amigos. Éramos una piña y nos dolió mucho. Creo que fue en juveniles. Muchos chicos dejaron la Escuela y fue un mal momento, porque éramos como una pequeña familia.

Has tenido muchos entrenadores en todo este tiempo. ¿Cuál te ha dejado mejor recuerdo?

Raúl Cardoso, porque fueron muchos años con él y fue la mejor etapa de fútbol.

¿Qué cambio de categoría recuerdas más duro?

De juvenil a aficionado, porque tuve muy mala suerte y comenzaron mis lesiones. Desde que estoy en el Primer Equipo, creo que he disfrutado entera una temporada. No sé si llevo seis o siete temporadas en el Primer Equipo, pues pasé de juveniles directamente al Aficionado A, y las lesiones me han castigado mucho.

¿Esta temporada tampoco te están respetando las lesiones?

No, llevo ya tres: primero fue un esguince de rodilla, luego una pubalgia y ahora una contractura en el cuádriceps. Solo he podido jugar seis partidos. Y la temporada pasada estuve a punto de dejar el fútbol por cuestiones de trabajo, pero al final hablé con Jorge y le dije que quería seguir aunque fuera en el B. Pero mejoró el trabajo, pude entrenar todos los días y seguí.

¿Quién es el compañero de equipo con el que mejor te has llevado?

Antes nos decían que éramos como un matrimonio, y era Juanfran. pero con el que más años he estado ha sido con Álvaro Mayoral, que se fue la temporada pasada.

¿Quién es el compañero de más calidad con el que has jugado?

Puede que sea Álvaro, que tiene mucha calidad. Si no fuese porque es muy vago, podría jugar donde quisiera.

¿El más cachondo?

Hugo, que ahora es mi segundo entrenador. También llegué a jugar con él y nos lo pasábamos muy bien. ¡Ah! y Álvaro Cejudo.

¿El más fantasma?

Pablo, al que apodábamos el Fasio. Se apuntaba los goles hasta en los amistosos.

Has vivido el crecimiento de esta Escuela. ¿Ahora es mejor que antes?

Ahora es un poco más profesional, por lo menos lo intenta. Ahora intenta tener más calidad y dedicación.

¿Para ti qué era mejor antes o ahora?

Como yo soy más tosco, me gustaba más el fútbol que se practicaba antes. Soy más de la vieja escuela.

¿Qué ves de positivo tras este crecimiento?

Ahora tenemos muchos más chicos y mucho más nombre. Estamos mucho más reconocidos que antes. Hoy en día, siempre te encuentras gente que conoce al Moratalaz. Antes no era tan conocida.

¿De qué equipo eres?

Del Madrid.

¿Has jugado alguna vez contra el Madrid?

Sí, varias.

¿Y quién querías que ganara?

El Moratalaz, siempre.

¿Defínete como jugador?

Soy contundente, ayudo a tener un buen ambiente en el vestuario y cada día intento aprender un poco más.

¿Qué es lo que mejor haces en el campo?

Mandar, me gusta mucho mandar. Pero a las hornadas más jóvenes no les gusta que les mande, porque chillo mucho y parece que les estoy echando la bronca, pero es al revés. Lo hago para mejorar, pero ellos no lo ven así. Yo estaba deseando jugar con el Primer Equipo para que me chillasen para motivarme. Pero ahora, los jóvenes se creen que lo haces para criticarles.

¿Qué debes mejorar?

La salida del balón, el juego de ahora.

¿En qué puesto juegas normalmente?

De central, pero no siempre he jugado ahí. Cuando era chiquitillo empecé de delantero, luego pasé al mediocentro y de lateral, y terminé de central.

¿Cuál te gusta más?

Llevo más años de central, por eso es ahora lo que más me gusta. Aunque me gustaba mucho de delantero, porque es el jugador que está más cerca del gol. Ahora los centrales siempre estamos en duda.

Siempre se dice que son los menos técnicos. ¿Es verdad o no?

Es verdad, somos los menos técnicos. Somos los albañiles del equipo, pero tiene que haber de todo.

¿El ascenso a Tercera División es posible?

Como dicen los toreros, hasta el rabo todo es toro. Y hasta que los puntos no digan lo contrario, vamos a intentar ascender. Está chungo, no hay que mentirnos a nosotros mismos, pero quedan muchos puntos por jugar y vamos a intentar dar la sorpresa.

La EDM lleva varios años intentando el ascenso. ¿Hay potencial para tener un equipo en Tercera División?

Creo que sí. No sé si llegaremos, pero antes de dejar el fútbol espero dejar al Moratalaz en Tercera. Una vez que llegue con el Moratalaz a Tercera, dejo el fútbol. Eso sí, si subimos, hay que cambiar bastantes cosas para mantenernos. Habrá que fichar gente de fuera que tenga experiencia. Hay que seguir con la línea de apostar por los jugadores de la casa, pero hay que disponer de tres o cuatro jugadores que marque la diferencia.

Preferente es una categoría muy física, en la que los equipos corren mucho y presionan. ¿Jugar con el estilo combinativo os perjudica u os beneficia?

A nosotros nos vienen mejor los equipos que nos achuchan a los que se cierran atrás. Los partidos que hemos perdido han sido contra equipos que se han encerrado y han esperado nuestro fallo. Por eso es mejor que nos presionen. Pero sí, es una categoría con equipos muy físicos. El juego nuestro nos viene bien, porque al ser un equipo formado por jugadores de pequeño tamaño, intentar competir con el físico es estar perdidos.

¿El no tener recursos para pagar a los jugadores limita el crecimiento del Primer Equipo?

No limita, pero si impide que algunos jugadores vengan a la Escuela. Gente que ha jugado en Tercera no suele venir a equipos que no paguen. No son como nosotros, que llevamos años y jugamos por ilusión, no por dinero. Pero la mayoría que ha jugado en Tercera lo hace por dinero, no por ilusión y por el escudo.

¿La EDM va a poder competir algún día de tú a tú con los grandes clubes de la Comunidad?

No tener un filial en una categoría alta lo dificulta, la verdad. Pero en la cantera estamos creciendo bastante. Ahí sí que podemos competir con ellos, porque ahora tenemos muchos niños, pero a nivel profesional nos queda bastante.

¿Cuál es tu objetivo aquí?

Seguir y disfrutar, e intentar llegar lo más arriba posible.

¿Has pensado en retirarte en la EDM?

Sí, porque el año pasado estuve bastante amargado porque no podía entrenar por el trabajo y por las lesiones.

 

“Antes se jugaba a ganar, ahora se juega a hacerlo bonito”

Es de los pocos miembros de la EDM que no es fan del estilo combinativo que se practica en la Escuela, aunque reconoce que es más vistoso y gusta más a los espectadores.

¿Cómo era el fútbol de esta Escuela antes de que se pusiera en práctica el estilo combinativo que hoy la distingue?

Antes se jugaba a ganar, ahora se juega a hacerlo bonito.

¿Y se gana más o menos que antes?

Creo que ganábamos más antes. Yo al principio ascendí bastantes temporadas.

Veo que no eres fan del fútbol combinativo.

Sí me gusta, pero no sé practicarlo bien. Soy más de la vieja usanza, más tosco, más físico. Pero reconozco que este fútbol es más vistoso y más bonito para el público.

¿Y más arriesgado a la hora de jugar?

Claro. En el Urbis, al ser un campo grande, no es tan arriesgado, pero los equipos que juegan en el Lili arriesgan mucho más, porque una pérdida es una ocasión de gol para el rival.

¿Ha merecido la pena ese cambio de estilo?

En el fútbol actual, el estilo que más se valora es el del toque, el estilo Guardiola. Yo creo que estaba en juveniles cuando empezó a practicarse este estilo en la Escuela. Creo que fue el primer año que nos entrenó Jorge Vallejo.

¿Qué cambio?

Sobre todo las pretemporadas. A partir de ese momento eran con balón y antes eran a base de correr por el parque. Ahora no san tan duras, pero como te he dicho antes, soy de la vieja usanza y me quedo con aquellas. Soy más de correr.

¿Es un estilo más difícil de aprender?

Sí, un poquito más. Y si vienes de jugar un estilo más directo, más físico, pues te cuesta más todavía. Si a los chavales que hay ahora les dicen que tienen que jugar como antes, seguro que no les gustaría.

¿Hoy parece que el que no practica este estilo, no sabe jugar al fútbol?

Exactamente, del equipo que no juega al toque se dice que es el antifútbol. Antes se jugaba más directo. Pero desde que Guardiola hizo el triplete jugando al toque, el que no lo hace así es como si no supiera jugar al fútbol.

 

“En general dicen que nuestros equipos juegan muy bien, aunque otros aseguran que estamos locos”

Desde hace muchos años tiene claro que no va a vivir del fútbol, aunque no descarta seguir ligado a este deporte dirigiendo a niños pequeños desde el banquillo, pero no a adultos.

Tras tantos años jugando al fútbol, ¿qué imagen tiene la EDM fuera?

El fútbol que practicamos da mucho que hablar. En general dicen que nuestros equipos juegan muy bien, aunque otros aseguran que estamos locos. En categorías inferiores tenemos muy buen nombre y ya ocurre que hay chavales que prefieren venir a jugar aquí que a clubes potentes, porque hacemos muy buen fútbol. También nos pasa como al Rayo en Primera, que hacemos muy buen fútbol y es un escaparate para que los jugadores destaquen y los llamen clubes grandes.

¿Sigues soñando con vivir del fútbol?

No, sé que ya no voy a vivir del fútbol. Me di cuenta cuando subí a aficionados. Por eso ahora quiero disfrutar y pasármelo lo mejor posible.

¿Has pensado alguna vez en entrenar?

Sí, ya lo hice. Empecé en chupetines con Luis Cañón, pero por temas de trabajo lo tuve que dejar, y las dos últimas temporadas entrené en el Tajamar, en prebenjamines y benjamines, pero ahora por trabajo también lo he tenido que dejar.

¿El día que dejes de jugar puede que sigas entrenando?

Sí, porque me gustan los niños, pero pequeños, no mayores. Los pequeños son divertidos y son los que vienen al fútbol con más ilusión.

¿Cuando dejes el fútbol te habrá compensado todo el esfuerzo que le has dedicado?

Seguro, mucho. El fútbol es como el tabaco para los que fuman, es una adicción. El día que no puedes venir a entrenar estás jodido, y cuando estás lesionado y no puedes participar con tu equipo estás de bajón.

¿El fútbol es justo?

No, no es nada justo. Tú le das mucho más de lo que te da. Y lo peor es el mamoneo, pues hoy en día solo se mueve por dinero o por nombres famosos.

¿Por qué es tan seguido en el mundo?

Yo creo que hoy es por el dinero que mueve. Pero mucha gente lo juega porque es divertido, se juega en grupo y se hacen muchos amigos.

 

“Acepté llevar el bar del Lili porque así podía seguir entrenando”

Su relación con la Escuela llega hasta el extremo de ser el encargado del regir el bar del Lili Álvarez, donde lleva desde octubre.

Hace unos meses te has quedado con el bar del Lili ¿Por qué?

Me lo propuso el dueño de los campos y acepté, porque así podía seguir entrenando.

¿Cómo va el negocio?

Poco a poco. Es una época difícil, pero poco a poco voy tirando. Da una pequeña ayuda para vivir. Ahora no tengo otro trabajo y me ayuda a tirar para adelante.

Allí contactas con mucha gente. ¿Cuéntame alguna anécdota graciosa que hayas vivido?

La verdad es que, de momento, no he vivido ninguna, pues llevo poco tiempo, solo desde octubre.

¿Qué tal la gente? ¿Cómo se porta?

Bien, hay buena gente, aunque como pasa siempre, te encuentras gente de todo tipo.

¿Hasta cuándo va a estar llevándolo?

Hasta que se pueda y todo vaya bien. Suelo estar solo y abro por las tardes, cuando el campo está abierto para los entrenamientos.