Partido igualadísimo y de gran nivel

La desconcertante actuación del árbitro confundió a todos

Alineaciones

EDM Cadete B: Pablo; Nacho (m. 44, Choaib), Kike, Marcos, Sergio, Miguel, Pablo (m. 46, Mario), Belloch (m. 70, Alex), Nico (m.51 Jorge), Antonio (m. 59, Purito) y Jordi.

C.D. Covibar A: Jose; Robert Marius (m. 70, Florin), Victor (m. 54, Jose), Fernando, Daniel, Manuel (m. 46, Javier), Enrique, Carlos, Pablo y Sergio (m. 72, Daniel).

Árbitro: Alberto Ruiz Rodríguez.

Goles: 1-0 (m.80): Jordi ,con la izquierda, a pase de Sergio.

Crónica de José Manuel Llorente; fotos de Miguel Agenjo

Empezó con retraso el partido entre el cuarto y el segundo clasificado de la liga, un encuentro con un plus de emoción, ya que el tercero y el primero habían empatado en sus respectivos choques matutinos.

El Covibar, un equipo físicamente poderoso, se plantó en el centro del campo dispuesto a presionar en el medio para salir rápido por las bandas y buscar desde allí a Pablo Trujillo, el goleador del equipo. El Morata, por su parte, salió a lo suyo, con un centro del campo muy técnico y una defensa inédita, intentaba salir jugando desde atrás para buscar después por dentro a sus puntas.

Y así discurrió el partido, en el minuto 12, Jordi roba un balón en tres cuartos de campo y se la da a Antonio en profundidad, que mal perfilado, dispara flojo con la derecha.

Las ocasiones se contarían con los dedos de la mano y el Covibar tuvo la más clara en el minuto 35: una falta sacada muy corta por el Morata propicia la salida en velocidad de los visitantes, Fernando, que demostró su visión de juego en varias ocasiones, busca con un pase cruzado a Pablo Trujillo, que obliga al portero local a despejarla a córner con su manopla izquierda.

En el m.37 vendría la respuesta del Morata. Jjugadón de todo el equipo, Miguel aprovecha la subida de Nacho en banda derecha, que de primeras se la pone a Antonio, y este con un toque habilita a Jordi, que se gira en el área para pegarla con la izquierda y obligar a José a pegarse un paradón, pero el balón quedó suelto y Nico, muy atento, vuelve a poner a prueba al portero visitante, que se levanta como un gato para evitar el primer tanto local.

Al final de la primera parte parecía que el campo se inclinaba un poco hacia la portería del Covibar. Así, en el 39, Antonio roba, fruto de su presión, y le mete el balón en profundidad a Jordi, que después de cruzarse bien por delante del central, dispara desviado con la derecha. Y así se llegó al descanso con 0-0 en el marcador, con los visitantes tirando más, con los locales desaprovechando las ocasiones más claras y con el árbitro confundiendo a todo el mundo.

En la reanudación, los de blanco salieron fuerte, con un par de tiros desde lejos intentaban que los locales recularan. Sin embargo, el Morata estaba muy bien plantado, con Kike sacando el balón con jerarquía, con Marcos anticipándose a todo y con Nacho y Sergio cerrando sus bandas a la perfección. La defensa era un bunker y desde ahí se empezó a ganar el partido.

En el minuto 45, Belloch hace un regate precioso en el medio y le mete un pase a Jordi, que le pega flojito. El carrusel de cambios nos dio más consistencia si cabe de la que teníamos. Las ayudas en defensa se sucedían y la segunda parte pasó en un abrir y cerrar de ojos con algún córner para el equipo, pero sin ocasiones claras, salvo dos posibles penaltis en el área de los visitantes, uno sobre Jordi y otro sobre Miguel, ambos dudosos.

El partido se moría. Sin embargo, en los tres últimos minutos del encuentro iba a pasar de todo. Los visitantes se fueron a por el partido y, en una jugada extraña, el árbitro pita una mano de Purito en la frontal. El Covibar saca la falta precipitadamente sin pedir pasos y los locales, muy atentos, cortan rápidamente  la jugada. La pelota la tiene Miguel y el medio centro visitante mete el pie por detrás y el colegiado le expulsa.

Los blanquinegros no se lo acababan de creer y quedan un poco descolocados, pero el partido está acabado. Sin embargo, los negros aprovechan el despiste y Miguel le mete un pase en profundidad a Sergio, que cabalga la banda izquierda ganando la línea de fondo y poniéndole un pase medido a Jordi, que con la zurda desde el punto de penalti busca la escuadra izquierda de la portería visitante. El guardameta la toca y el esférico pega en la barra interior que sujeta la red de la portería, pero el balón, a pesar de entrar entero, bota luego fuera. El árbitro lo ve claro y, como no puede ser de otra manera concede, el gol. Después pita el final del partido, lo que genera las protestas del equipo visitante, sin pasar a mayores.

1-0 y final del partido. Un encuentro muy igualado y de un gran nivel, que cayó del lado de los locales en el último suspiro. Quiero resaltar hoy nuestra solidez defensiva, la solidaridad de nuestros mediocampistas y el trabajo e inspiración de los puntas. Quiero destacar también el buen comportamiento de la grada, que ante un partido tan tenso y confuso, no perdió en ningún momento los nervios.

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