El empate hubiera sido lo más justo

El equipo de la Escuela dio la cara y estuvo a punto de ganar a un Rival que no brilló

Alineaciones.

EDM Benjamín B: Carlos, Pablo, Juan Diego, Diego, Arturo, Alejandro, Sergio, Dani G, Manu, Iván, Eduardo y Andrés.

Fundación Rayo Vallecano: David M, Pablo A, Marcos, Jorge, Alejandro, Iker, David R, Abel, Manuel, Saúl, Martín y Pablo A M.

Goles: 0-1 (m. 2): Abel; 0-2 (m. 6): Alejandro; 1-2 (m. 20): Eduardo; 2-2 (m. 22): Andrés; 2-3 (m. 35): Iker; 3-3 (m. 40): Eduardo y 3-4 (m. 40): Martín.

Árbitro: Diez Guiance, Roberto.

Crónica de Alfredo Pascual

La décima jornada de liga, trajo un enfrentamiento de dos grandes escuelas de fútbol base. El partido se inició con dominio rayista. La escuela, encerrada en su campo, trabajó a pleno rendimiento- Fruto de esta presión encajó dos goles, uno en el minuto 2 y otro en el minuto 6. La EDM reaccionó y rompió el cerco, empezó a jugar y el rayo desapareció por completo, aunque intentó sorprender con balones en largo de su guardameta a sus delanteros, pero fueron cortados por nuestra defensa.

En una de estas acciones de saque, el portero salió y cometió mano por traspasar la línea del área. Jugada polémica, protestada ampliamente por el técnico rayista, que acabó con su expulsión por discutir la decisión arbitral.

Nos dispusimos a ejecutar la falta, lo hizo Eduardo, con un disparo soberbio, el balón terminó en el fondo de las mallas, afianzando más nuestro claro dominio del partido, fue el minuto 20, y el árbitro, pitó el final de la primera parte.

Comienzo de la segunda parte, ¡al ataque! ¡sin descanso!, a los dos minutos el cuadro de la escuela consiguió en un contraataque muy bien conducido el gol del empate, su autor Andrés, minuto 22. El olor a derrota del Rayo se masticaba, cundió la desolación en sus filas, intentaron pararnos de todas las maneras posibles, el control del partido era nuestro en esta segunda parte, teníamos la posesión del balón, el juego se endureció, la delantera del Rayo  no progresaba, tenía cerrados los espacios, nuestro central se encargaba de ello.

Buscando el gol que llevara a la victoria, nos pillaron en rápido contraataque, un defensa y el portero era lo único que teníamos para tratar de pararlos, bien en un principio, pero con poca fortuna, el balón lentamente, traspasó la línea del gol, mala suerte, minuto 35. Ahora les tocaba defender este resultado con uñas y dientes, quedaban 5 minutos y había que volver a empatar, lo conseguimos, Eduardo volvió a transformar una falta cometida por ellos en gol, con un disparo desde el medio campo, en el minuto 40.

El segundo técnico del Rayo, desde la banda, indicó el disparo directo a puerta desde el centro del campo, el balón, otra vez desafortunadamente para nosotros, entró en la portería. Ya no nos quedaba tiempo para reaccionar, contagiados y llenos de rabia por la acción de su gol, lo intentamos nosotros, recordando algún choque anterior donde habíamos perdido por culpa de esta jugada, no lo conseguimos. Final, el árbitro indicó el  camino de los vestuarios.

Otra vez habíamos perdido por la mínima, jugando bien, con el control y el dominio del balón, es lo positivo. En cuanto al resultado, injusto, no refleja para nada lo vivido por los dos equipos en el campo.

Felicitar en su conjunto a todo el equipo, hicieron un partidazo, e inconmensurable el trabajo realizado por Iván y Arturo, los centrales del equipo. También a nuestros técnicos, Daniel Aparicio y Adrián Gil, por su genial esquema táctico.

Agradecer a los padres de nuestros adversarios su buen criterio, que a su juicio reconocían el mejor juego de la Escuela y consideraban más que justo un empate. Y  una clara mención a la buena actuación arbitral, el señor colegiado supo estar a la altura de la circunstancia y pendiente de todas las jugadas.

¿QUÉ SOMOS? ¡UN EQUIPO! ¿QUÉ VAMOS A HACER? ¡GANAR! ¿CON QUÉ? ¡CON GANAS! UN, DOS TRES, MORATA BIEN!!!