Partido de dos mitades y dos caras
Los nervios de los primeros cuarenta y cinco minutos pasaron una factura que no pudo arreglarse en una segunda parte de mérito
Alineación:
EDM Alevín D: Javier; Ismael, Francisco Jesús, Roberto, Zoilo, Juan Pablo, Adrián, Juan, Samuel, Ander y Fabricio.
Cambios: Javier (30′), Álvaro (30′), Jorge (30′) y Álvaro Arasanz (35′)
Goles: 1-0 (m.9): Ronny; 2-0 (m.16): Luis Miguel; 3-0 (m.24): Luis Miguel; 3-1 (m.48): Jorge.
Sin tarjetas
Crónica de Juan Antonio Maqueda
El Alevín D, tras haber dejado un buen sabor de boca en la Halloween Cup del Vallecas, se enfrentaba en partido de liga al Unión Elipa. Surgía la duda de si tres días seguidos de competición no pasarían factura. Sin embargo, los chicos estaban con fuerza y ánimo.
El partido comenzó con iniciativa y mucho empuje del Moratalaz, aunque con poco orden. Los de la Elipa en los primeros minutos, en cambio, se dedicaron a contener en su campo, para recuperar y evacuar balones directamente a sus delanteros, eso sí, muy rápidos.
Así las cosas, el Moratalaz no hacía daño y la Unión Elipa caía, una y otra vez, en fueras de juego que invalidaban sus contraataques. Sin embargo, pronto comenzaron los errores. El primero, en el minuto 9, lo cometió el árbitro no pitando un fuera de juego que todo el mundo vio menos él. El 11 del Unión Elipa, no solo estuvo dos metros adelantado, también rapidísimo y, tras una carrera de más de 30 metros, se plantó delante del portero, Javier, que no pudo hacer nada.
Con el marcador en contra y la sensación de no avanzar, vino la epidemia de nervios, y estos llevaron a más errores y éstos a más nervios y a más errores. Si en vez de fútbol hubiera sido baloncesto, pedir tiempo muerto hubiera sido obligado. El Moratalaz empezó a tener dificultades en su propio campo y al Unión le bastó hacer lo que venía haciendo, presionar, ahora más adelantados, y esperar los fallos del contrario para sacar ventaja. Así llegaron otros dos goles del Unión Elipa y una sensación de extraña impotencia ya que, a todas luces, el excesivo marcador no reflejaba la diferencia entre los equipos.
Llegó el descanso y Pani encerró a los chicos en el vestuario. No sabemos lo que les dijo, pero desde luego hizo efecto. Al poco de comenzar la segunda parte, más que un segundo tiempo parecía otro partido. Otras sensaciones, otro orden y otra confianza no tardaron en percibirse.
Otra vez el Unión Elipa estaba en su campo y el Moratalaz apretaba. Como al principio del partido; solo que esta vez no había grandes errores, ni los nervios traicionaban. El partido, a partir de entonces, fue lo que debería haber sido todo el tiempo: el Moratalaz atacando y la Unión Elipa defendiendo y contraatacando.
En la segunda parte, el centro del campo se fue haciendo del Moratalaz. Era el equipo de la Escuela el que más construía las jugadas y el que antes recuperaba los balones. Zoilo, valiente, y Jorge, imponiendo su presencia. Atrás Fabri, mandando en la defensa y contagiando de seguridad a sus compañeros. Por la derecha, Álvaro Pérez y Adri empezaron a combinar y a acercarse al área del Unión cada vez con más peligro. Sin embargo, las primeras oportunidades serias vinieron por la izquierda. Juan tuvo dos claras oportunidades de gol, y el árbitro, que en la primera mitad no vio aquel fatídico fuera de juego, anuló una jugada del Moratalaz por un más que dudoso offside.
En el minuto 48, Ánder recoge en campo propio un balón rechazado por los de la Elipa y lejos de ponerse nervioso, pese a la presión de los contrarios, mira y cede al portero, Chico. Éste tampoco se pone nervioso, controla con el pie, mira y da un pase fuerte y controlado que supera el medio campo. A partir de aquí, gran mérito de Álvaro Arasanz: recoge el balón, lo controla y se va para adelante con decisión, recortando a dos contrarios, ya próximo al área, da un pase adelantado a Adrián, quien, en carrera y con un solo toque, pone el balón en el área chica; el guardameta del Elipa no puede atajarlo y Jorge, que viendo la jugada ha entrado directo por el centro del área, remata con el pie derecho y manda el balón al fondo de las mallas.
Los últimos doce minutos, más de lo mismo, juego y oportunidades del Moratalaz. A destacar la de Adri, a quien le pitaron una falta dudosa cuando se quedaba solo dentro del área, y la de Jorge, quien tras un pase de Samu disparó desde la frontal, aunque flojo. Álvaro Arasanz, tras un bonito recorte dentro del área, lanzó un disparo a puerta con mucho peligro. Zoilo y Juan también lanzaron a puerta. El Unión Elipa tuvo oportunidades al contraataque, si bien Chico, atento, y Fabri, luchador, supieron desbaratarlas.
Una pena tantos nervios en la primera parte. Toca seguir trabajando y coger seguridad para que los resultados empiecen a acompañar.
